El objetivo es reducir la grasa corporal hasta un nivel que nos produce una mejora de la salud física y que afecta en realidad a todo el conjunto de la persona.
A continuación se detallan algunas recomendaciones generales sobre algunos de los alimentos aconsejados en cada grupo, que siempre serán individualizadas por su Médico en cada caso.
El agua: El agua no sólo es una bebida muy refrescante y la que mejor calma la sed, sino que es imprescindible para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Leche y derivados: Leche desnatada enriquecida con vitaminas
Quesos : frescos y otros tipos de quesos con un porcentaje de materia grasa de alrededor del 20% como máximo.
Yogures desnatados y edulcorados.
Frutas : Las frutas de temporada son un buen aliado ya que tienen un buen poder de saciedad y la mayoría tienen pocas calorías. Es muy importante respetar las cantidades recomendadas por su Médico, ya que no es correcto abusar de estos alimentos.
Procurar evitar: Plátanos, uvas, higos, aguacate,.
Las frutas las tomaremos al natural o como máximo en su jugo y evitaremos todo tipo de frutas en almíbar , en compotas y mermeladas .
Verduras : Las verduras son imprescindibles por su aporte de vitaminas, minerales, fibra y agua. Al igual que las frutas hay algunas verduras que son altas en hidratos de carbono que no conviene abusar, su Médico en la consulta le informará de este aspecto. Hay que evitar las técnicas y recetas que aumenten su nivel calórico.
Carnes : Utilizaremos principalmente las carnes blancas como pavo, pollo, conejo, y carnes rojas magras como caballo, ternera, cerdo magro, buey.
Es muy importante retirar la grasa visible y la piel si la tuviera.
Huevos : Debido al contenido graso de la yema, no es conveniente tampoco abusar. Disminuiremos mucho la cantidad de grasa utilizando principalmente las claras, actualmente existen en el mercado claras de huevo pasteurizadas envasadas, que nos vienen fenomenal para hacer los revueltos.
Pescados y marisco : Respecto a los pescados, tanto blancos como azules están aconsejados simplemente disminuir las raciones de los azules a una o dos por semana, pero no eliminarlos y así beneficiarnos de su propiedades cardiosaludables.
Cereales, legumbres y féculas: Respetar mucho las cantidades aconsejadas en cada caso, debido a su aporte de energía para el movimiento, sabiendo que vivimos en una sociedad de estilo de vida sedentario.
Es importante comprender que en el sobrepeso y obesidad, el objetivo no es solo una pérdida de peso, sino un cambio de hábitos alimentarios y de estilo de vida con el fin conseguir un peso más saludable PARA SIEMPRE. Las personas que lo consiguen son porque, primero acuden a las revisiones y segundo practican los principios que las personas del equipo les enseñan.
Fuente: Dr. Florez..
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